Editorial de VideoFlims en catálogo del BARS 2012

MEDIO: Catálogo del Buenos Aires Rojo Sangre 2012
FECHA: Noviembre 2012
Editorial de VideoFlims en catálogo del BARS 2012

Juntos y a la par

Todos los festivales de cine tienen una identidad cultural definida, pero solo algunos son capaces de transformar esa realidad en algo verdaderamente trascendental y único como lo hace el Buenos Aires Rojo Sangre. Se trata del enorme impulso de una movida que no para de ir hacia adelante, todos juntos y a la par. Por eso, para nosotros, los que hacemos VideoFlims Distribución, ser parte de semejante evento social, desde nuestro humilde espacio, es lo más importante del mundo. Ahí, como cada edición, y no es un lugar común más sí una realidad comprobable, vemos crecer, nutrir y regar al semillero del cine de género nacional y popular. Allí, en ese espacio que anhelamos el resto de los meses donde no sucede, se produce aquel mítico encuentro entre los viejos y los nuevos. Entre los de siempre, los que estuvieron y los que mañana estarán. Aquí, entonces, apoyados en ese lugar donde surgen proyectos novedosos cada vez, en un ámbito alejado de egoísmos, con pluralidad comprobada, y donde, primero en orden de importancias, a través de la amistad y el amor por las películas, disfrutamos y compartimos nuestro arte con los demás. Y si hay algo que nos relaciona directamente con el festival y su corazón, es justamente el amor con que se llevan adelante las cosas. Ese que se siente día a día. Desde ahora hasta que termine. Y desde que se termine, en forma sucesiva, hasta la eternidad. Por todo aquello, sí, celebramos un año más unidos: VideoFlims y el Buenos Aires Rojo Sangre, un solo corazón.

Pablo Marini, Hernán Panessi y Esteban Rojas VideoFlims Distribución

Nota The Watch

MEDIO: Revista Haciendo Cine
FECHA: Octubre 2012
Nota The Watch

La guerra de los mundos

Nativos de ese momento exacto donde la comedia estadounidense moderna reveló más que buenas hilachas, los míticos Ben Stiller y Vince Vaughn se juntaron otra vez para traernos una de ciencia ficción o algo por el estilo. | Por Hernán Panessi

En el episodio “Homero Detective” de la temporada 5 de esa caja de resonancias llamada Los Simpsons, Homero se pone al frente de una patrulla civil. Una suerte de improbable grupo policial cuyo propósito es hacerle frente al Gato, un sofisticado ladrón que burló a todo Springfield. Asimismo, en la lógica de convoy desordenado, de cocoliche alterado pero siempre intrépido, se le suma otro clásico contemporáneo: Los Cazafantasmas, donde un equipo de parapsicólogos, también dispar, investiga fenómenos paranormales utilizando tecnología sofisticada. Sobre esos dos ejemplos que, en rigor, nada parecen tener que ver entre sí, se construye el devenir de The Watch, nueva fábula de los héroes actuales de la comedia norteamericana. En The Watch, una patrulla de vigilancia vecinal, compuesta por cuatro hombres suburbanos que quieren pasar el tiempo lejos del agobio de sus familias y sus obligaciones, descubrirá algo que se le irá de las manos. Develarán, de forma accidental, una increíble conspiración relacionada con la posible destrucción del mundo a causa de una invasión alienígena que tratarán de frustar. Sostenida en los cánones de la masculinidad actual, ahí donde se funden y confunden cuestiones tales como los adultescentes, los diálogos hilarantes y la inmadurez social, el equipo que conforma la patrulla responde a la siguiente alineación: Evan (Ben Stiller), un gerente sexualmente frustrado en el rol de líder; Bob (Vince Vaughn), un padre sobreprotector con ganas de joder (en el reencuentro con Stiller desde Cuestión de Pelotas); Franklin (Jonah Hill), un policía wannabe un tanto endeble mentalmente (inevitable recordar su reciente rol en Comando Especial) y Jamarcus (Richard Ayoade), un británico agradable cuya fantasía es la de rescatar amas de casa solitarias.
Con un concepto que ya ha funcionado sobremanera –caso: Hombres de Negro, Marte Ataca! y, más acá, Attack the Block-, aquel que pone a personajes normales en situaciones extraordinarias, ese que terminará finalmente con la defensa del mundo contra una invasión extraterrestre, The Watch supura situaciones de auténtica vulgaridad –de la buena- producto de la caligrafía de Jared Stern, Evan Goldberg y, sobre todo, de la de Seth Rogen. Aquí, se pone a unos amigos inadaptados al servicio de la protección de su pueblo pero que, pese a los nombres y a lo promisorio de su sinopsis argumental, aún con ello, todo se desenvuelve tibiamente. Incluso, desde acá, emegerán algunos subtramas que apenas aportan, como una hija rapidona, unas aventuras sexuales, un policía incrédulo (que no es otro que Will Forte, el de MacGruber) y un recuento de esperma, sin que ninguno se desarrolle demasiado ni termine por ser fundamental en la historia.
The Watch, entonces, es un caos confuso de géneros, profundizando fundamentalmente en la comedia, pero que no se achica en sugerir algunos tintes de horror, monstruos viscosos, hasta incluso alguna cosita de romance y, sí, como era de esperarse, mucho de acción. En rigor, esa situación poco categórica hace que el film navegue en su desconcierto, en qué mundo quiere identificarse en realidad. No obstante, el olor a la verborrea de Super Cool deviene a que estas películas sigan gustando sin cuestionamientos del tipo intelectual más que el de relajarse y entregarse a lo que venga. Así, bajo esa premisa un tanto conformista pero, a la sazón, acertada para seguir a tales producciones, se miran sin importar si acuden a problemáticas como el aislamiento, la desconfianza, la recuperación de valores familiares, los asesinatos, los alienígenas o la gran pavada.

Nota Errantes (entrevista a Lisandro González Ursi y Diego Carabelli

MEDIO: Revista Haciendo Cine
FECHA: Octubre 2012
Nota Errantes (entrevista a Lisandro González Ursi y Diego Carabelli

El ser gaucho es un delito

Los habitantes del asentamiento La Lechería, situado ahí entre los barrios de La Paternal y Villa del Parque, son los principales protagonistas de Errantes, importante documental que registra los pormenores de un intento de autogestión en pos de una vida mejor. | Por Hernán Panessi

“Para él son los calabozos; para él, las duras prisiones; en su boca no hay razones aunque la razón le sobre: que son campanas de palo las razones de los pobres”. José Hernández, en El Martín Fierro (1872)

Cuando el pene de los acontecimientos, ese que deja erguido casi siempre la visión fatalista de la clase media más recalcitrante, quede flácido, cambiará el posicionamiento por sobre tal constante, tendenciosa y parcial identificación. Ya no se verán los hechos desde aquel prisma que fomentó el noticiero y su sistemática construcción de la otredad. Es que al referirnos a la entelequia desalojo, la cuestión perceptual queda regularmente posada en la edificación mediática proclamada como vecino indignado. Por caso, Errantes, documental dirigido por Lisandro González Ursi y Diego Carabelli, ganador del premio a “Mejor Película” en el Festival Tandil Cine XI, da vuelta el espejo, se corre de este vetusto postulado y devela el reconocimiento de su propia silueta en los ojos, garra y corazón de un grupo de vecinos autoconvocados con el fin de conseguir una vivienda digna.
Tanto en televisión (donde esta vicisitud es harto explotada –siempre pintada de amarillo-) como en el cine (que, en la Historia, poco se le animó –salvo excepciones que han tratado el “habitar” como Construcción de una Ciudad, de Néstor Frenkel y En Construcción, de José Luis Guerín-), los tópicos promovidos –el vecino nervioso por la inseguridad, el comerciante apuntando con el dedo, la señora quejándose en forma irracional del villero- tuvieron que ver con una moral instaurada. Y en Errantes, tal moral se reinventa devolviéndole al mundo un estado de situación del que, a la sazón, la mayoría de los medios han negado: la versión del que menos tiene. “Tal vez lo interesante de Errantes resida en dónde se construye el punto de vista. Estamos acostumbrados a que el relato de los hechos esté construido para acomodarse al discurso de algunos sectores sociales medios y medios-altos. Por lo tanto, está profundamente arraigada la idea de un ‘sentido común’ que termina estereotipando, cosificando y reduciendo al mínimo la complejidad de cualquier conflicto social”, dice González Ursi.
Así, el pobre nunca tiene razón porque es pobre. Porque no tiene quién lo defienda. Porque sólo él puede defenderse. Pero él, aunque hable y diga sus razones, éstas no son campanadas de bronce, sino, como en El Martín Fierro, serán campanadas de palo. Y aquella es la desdicha de todos los desclasados, de aquellos marginados de la civilización del progreso. “El discurso mediático habitual respecto a los grandes temas en general y los sociales en particular repite su lógica hasta el cansancio. Siempre se intenta advertir que se habla para ‘la gente’, cuando en realidad nunca terminan de sincerar que para ellos, los grandes medios, no toda la población entra en esa categoría. En general, las coberturas de los conflictos sociales siempre tienden a contarlos para ‘la gente’ que nunca es protagonista de ese conflicto, sino que es un actor secundario y muchas veces hasta circunstancial”, agrega Carabelli. El imponderable social es ingresar en un mundo donde se come, se vive, se pertenece a una sociedad, se tiene un hogar digno en el que vivir. Esa sensible problemática de los habitantes de La Lechería, lugar donde transcurre la investigación, que es su infatigable lucha. “Es fácil enterarse qué arterias de tránsito están cerradas por una protesta, cuántos manifestantes hay, cuánta demora de tránsito existe, pero rara vez se presenta el conflicto que atraviesan esos manifestantes”, sentencia González Ursi. Y, acá, Errantes subraya, queda demostrado que el eje comunicacional de los mass media no funciona bien desde donde se posa, y acaso que deberían de abrirse a otras miradas, encontrar una dialéctica, proponer un diálogo. Adaptarse. Sumar. Crecer.

Nota Esperando la Carroza (entrevista a Diana Frey)

MEDIO: Revista Haciendo Cine
FECHA: Noviembre 2012
Nota Esperando la Carroza (entrevista a Diana Frey) (01)
Nota Esperando la Carroza (entrevista a Diana Frey) (02)

De pucheros y ravioles

Sin anestesia: llega a los cines el primer reestreno de una película nacional y, para ello, qué mejor que Esperando la Carroza. Por tal motivo, dialogamos con su productora Diana Frey sobre el público, su imaginario, la vuelta, el legado y las secuelas. | Por Hernán Panessi

Cuando se habla de cine, escasas son las verdades categóricas. Pocas son esas sentencias que, de tan contundentes, no necesitan comprobación porque, en sí mismas, tienen el suficiente peso de su validez. Por eso, ni bien asomó la cabeza en el año 1985, Esperando la Carroza se convirtió, de forma tan plena y abrumadora como inconsciente e instintiva, en la síntesis de la argentinidad, en el fiel reflejo de la familia tipo argentina. Con el tiempo, las pasadas infinitas en televisión abierta (suscitando, en cada una, elevados índices de audiencia como si se tratara de un estreno), la identificación por el costumbrismo, sus ediciones en DVD, el sólido elenco de actores, la recomendación casi hereditaria a las nuevas generaciones y demás, hicieron de la película del maestro Alejandro Doria un film definitivamente de culto.
Inspirada en una obra teatral homónima del uruguayo Jacobo Langsner, y cuya versión cinematográfica local está protagonizada por Antonio Gasalla, China Zorrilla, Luis Brandoni, Betiana Blum, Julio de Grazia y muchos más, Esperando la Carroza encuentra ahora, 27 años después de aquel estreno, su remasterización y vuelta a los cines en formato digital. La noticia, asimismo, es que sienta un precedente: será la primer película argentina en ser remasterizada y reestrenada.
“Es un caso único, en este panorama de la cinematografía nacional, donde una parte del público la aclama. Es muy querida. Se estableció con ella una relación casi familiar. Hay películas mucho más importantes que ésta en la historia del cine mundial, uno las guarda en el corazón, pero lo que ocurrió con el público es como una oración”, apunta Diana Frey, productora y una de las responsables en llevar adelante el proceso de su vuelta a las grandes pantallas. En épocas donde el reestreno de clásicos dejó de ser una novedad y se volvió, más bien, una parte posible en el escenario de la industria –ya regresaron desde Volver al Futuro hasta El Rey León, pasando por Top Gun, El Padrino, Scarface y algunas otras-, el mayor de los motivos de sus regresos está, fundamentalmente, en el advenimiento de las técnicas de remasterización y las proyecciones en DCP (en criollo: cine digital que soporta varias resoluciones, múltiples audios, formatos de imagen y diferentes capas de subtítulos). “Creo que la gente la va a poder ver mejor en DCP. Porque haciendo un negativo y luego un positivo, hay una perdida de una generación. El gran desarrollo tecnológico permitió que la película pueda ser restaurada”, agrega, a la sazón, Frey.
Esperando la Carroza llegará a los cines argentinos en un estreno bien federal: contando con unas 40 o 50 copias de exhibición. Para que esto sea posible, para que la película de Doria se vea mejor que nunca, un gran conjunto de personas puso su labor en el proyecto de restauración. “Primero, se hizo una pasada automática donde se borró lo más evidente. Después, se escaneó fotograma por fotograma y se retocó uno por uno. Luego se hizo un conformado, donde se editaron de nuevo todas las partes que trabajaron por separado. Desde mayo de este año que Cinecolor está en ello”, comenta la productora a propósito de la mejora en su calidad visual. “Si todo funciona bien, vamos a ver Esperando la Carroza mejor que la original”, añade.

El público posible No importa cuál sea su forma, pero cada vez que Esperando la Carroza dice presente, hay un emergente natural que completa su existencia: el público. Pocas son las películas que generan tantas emociones conjuntas en esa baulera amorfa llamada nostalgia. Y el largometraje de Doria, cuya historia es llevada adelante en forma notable por Antonio Gasalla en el rol de Mamá Cora, que tiene tanto de comedia como de drama (aunque, se sabe: la comedia es el drama más el tiempo), toca algunas fibras sensibles de un público que, en general, ya la vio pero que no titubea un segundo en repetir experiencia. “Es un misterio lo que pasará”, expone Diana Frey sobre su vuelta. “Va a ocurrir lo que tenga que ocurrir. Mi especulación es la siguiente: mucha gente no la vio en la sala. Y el fenómeno de verla allí es completamente distinto porque se genera una energía... es una fiesta popular. También, aunque parezca raro, hay gente que no la vio. El reestreno está dirigido a todos los que la vieron pero no en salas, a todos los que no la vieron y a todos los que quieran volver a verla”, completa la también productora de Cien veces no debo, otro de los hits criollos cargados en argentinidad, en un recorte que define un posible estado de situación ante el reestreno de este clásico del cine nac & pop.

La secuela que no fue Tal vez en el súmmum de aquel motor endeble que son las secuelas innecesarias, en el año 2009 se estrenó comercialmente una película llamada Esperando la Carroza 2 (sobre ella, Frey señala: “no quiero opinar de esa película porque no es nuestra”). Una continuación innecesaria que terminó más por fastidiar al público que por darle una nueva cuota de diversión. Sin embargo, esta película, que es más un indeseado spin-off que cualquier otra cosa, y que no guarda tanta relación con la original más que la aparición de algunos personajes y leves referencias narrativas, no fue la única intención de legar esa germinal historia de 1985. “Cuando terminamos Esperando la Carroza, se hizo una adaptación de Barbacoa (N. de redacción: obra de teatro de Jacobo Langsner, suerte de legado de la original). El problema era que no estaba viva Mamá Cora. En la obra de teatro original de Esperando la Carroza, Mamá Cora aparece sólo al principio y al final. Al haber hecho la adaptación cinematográfica, se generó una complicidad con el público. Siempre se sabe que está viva. En la versión para cine de Barbacoa, Mamá Cora por supuesto que no estaba pero Gasalla interpretaría a todos los invitados de una fiesta que tenía la familia. Fue Alejandro (Doria) quien dijo, hoy con la prueba de que estaba acertado, que no podíamos competir contra nosotros mismos, que dejáramos la primera para el recuerdo. Todo esto a sólo cinco meses de haberla estrenado”, rememora Frey sobre una secuela que no fue.

Reseña: Salvajes (2012)

MEDIO: Revista THC
FECHA: Octubre 2012
Reseña: Salvajes (2012)

Salvajes
Estados Unidos, 2012 / 131min.
Dirigida por OLIVER STONE
Pocas son las virtudes de aquel Oliver Stone notable de Pelotón, Nacido el 4 de Julio o JFK en Salvajes. Acá, una dupla de productores de marihuana (uno, biólogo; el otro, surfista –oh, ¡los clichés!-) se enfrentan contra un cartel que secuestra, sí, a su “novia compartida”. Salvajes, a la sazón, es una película sostenida en un trío amoroso (Taylor Kitsch, Aaron Johnson y Blake Lively). “Lo único que tienen en común, soy yo”, dice ella, vértice femenino de este amor. Uno donde, en rigor, nunca se da argumentación fehaciente como para creerles. Sin embargo, en Salvajes, adaptación del libro de Don Winslow, Stone se entromete en una historia del tipo Traffic -esa donde un presidente le planta guerra a las drogas, sólo para descubrir que su hija era adicta- pero en clave juvenil, en la que dos muchachos arriesgan sus vidas embistiendo contra todo en plan de rescatar a su chica. Del elenco de Salvajes, los “veteranos” se cortan solos: Benicio del Toro como subjefe del cartel, John Travolta como policía corrupto y Salma Hayek como madrina de la mafia. Los tres, a su modo, llenan los pasajes desperdiciados por vaivenes del guión y por el resto de la estructura del filme dignificando, apenas, un cuento violento. Y aún así, pese a contener aristas de fricción y ese otro trío de buenas actuaciones, el final, como el tridente protagónico, termina siendo más barato que polémico. / Hernán Panessi

Reseña: Evil Bong (2006)

MEDIO: Revista THC
FECHA: Octubre 2012
Reseña: Evil Bong (2006)

Evil Bong
Estados Unidos, 2006, 86min.
Dirigida por CHARLES BAND

Películas de fumones. Ese sub-género tan transitado por el cine norteamericano, cuyos destacados exponentes son las sagas de Cheech & Chong (antes) y las de Harold & Kumar (ahora), encuentra un nuevo caso para su filmografía de la mano de, precisamente, el mítico Tommy Chong. En Evil Bong, comedia liviana con algunos tintes terroríficos, un grupo de amigos compra una pipa de proporciones animales que, según advierte su publicación, utilizarla acarrea efectos secundarios severos. Al fumar de este evil bong, una nube psicodélica se apodera de las conciencias transportándolas a un harén de chicas sin sostén quienes, manejadas por una entidad paranormal, terminan por quedarse con la vida de los cautos cannábicos. Por eso, Alistar, el más despierto del convoy, descubre el chanchullo de la entidad maléfica y se entromete en ese mundo de alucinaciones para rescatar a sus amigos. El mencionado Chong hará las veces de habituado fumón que viene, también, a su modo, a salvar al mundo de las garras del mal. Aquí, Charles Band, veterano realizador y productor de filmes serie b (en una lista que contiene casi 40 largos como director y más de 250 en roles de producción -¡figuran desde Re-Animator a Tourist Trap!-), se despacha con una historia sencillita confeccionada para ser vista al calor de volutas de humo. / Hernán Panessi

Nota: Argo

MEDIO: Revista La Cosa
FECHA: Octubre 2012
Nota: Argo (01)
Nota: Argo (02)

Hace más de 20 años ocurrió un hecho que pedía pista: un agente liberó a unos rehenes haciéndose pasar por guionista. ¿Eh!? Ben Affleck encaró el proyecto y de eso salió Argo, su nueva película. Como la historia está atravesada por cuestiones nerdas, le pedimos al afín Hernán Panessi que nos desasne un poquito sobre qué va la cosa.

Desde una línea imaginaria que une a Steven Spielberg, Jack Kirby y Roger Zelazny con la CIA, unos rehenes en Irán y el flamante largometraje de Ben Affleck, la teoría del caos cobra más sentido cuando el (des)orden se impone desde vías improbables. Así, vale aclarar que Affleck estrena film. Que Affleck, asimismo, aquel actor cinco puntos que como director es casi un diez, toma la historia de una liberación, esa de seis estadounidense atrapados en la embajada canadiense durante la revolución de 1979 en Irán, y la convierte en ficción. Y es, también, sobre esta narración donde se posa la tríada de artistas mencionada al comienzo. Ahí, la CIA le encarga al agente Tony Méndez liberar a los rehenes. John Chambers, artista de maquillaje de la película basada en Lord of Light, cuya novela fue escrita por Roger Zelazny, que estaba a punto de rodarse, sugiere a Teherán –capital de Irán- como posible locación. Lo que no sabía el mundo es que Chambers y Méndez eran grandes colaboradores y, bajo esta excusa, el agente especial podría infiltrarse sin llamar la atención y rescatar a los capturados. El 25 de Enero de 1980, Mendez ingresó a Teherán como “consultor de guión”, utilizando el nombre de una falsa compañía –que durante su existencia fantasma recibió 26 proyectos ¡entre ellos uno de Spielberg!-. De esta forma, con el debido resguardo, los rehenes fueron liberados llevando consigo pósters dibujados por Jack Kirby. Aquí, este enredo que tenía consigo alma de película, finalmente, se convertiría en tal con dirección y protagónico de Affleck. Ese que, cada vez que puede, como en Desapareció una Noche (Gone Baby Gone, 2007) y Atracción Peligrosa (The Town, 2010), se lleva las palmadas de esa otra tríada difícil de conciliar: la industria, el público y la crítica. Factor hercúleo que lleva a mencionar, apenas estrenada, esa dulce palabrita llamada “Oscar”.

A favor de Ben Affleck y La Liga de la Justicia
Este año, la cosmogonía pop ya supo de “equipos de los sueños superheroicos” con Los Indestructibles (The Expendables 2, 2012) –por fuera de las historietas- y Los Vengadores (The Avengers, 2012) –de las entrañas comiqueriles-. Por eso, ahora, el gran anhelo fílmico de la compañía DC Comics es hacer la película de la Liga de la Justicia. Esa noticia, a la sazón, trajo apuntalado un fuerte rumor: la dirigiría Ben Affleck. Ciertos sectores de la prensa no especializada ven a esta supuesta asignación como un contraste imposible. Sin embargo, Affleck, para quienes conocen de su devenir y su probada espalda comiquera, se eleva como un candidato más que firme para suplir cualquier expectativa. Después de haber protagonizado Daredevil (2003), de rechazar una oferta para dirigir la nueva de Superman (Man of Steel, 2013), de su probada amistad con el oráculo nerd Kevin Smith (por caso, guionista habitual de Daredevil; uno de los tipos que más puso a Ben –por H o por B- en las primeras planas), de pronunciarse en más de una oportunidad como un gran fanático de los superhéroes y de aquel extraño carácter transitivo que llevó a involucrar a Jack Kirby con Argo (2012), Ben Affleck puede resultar un candidato más que interesante para llevar adelante tamaño proyecto. Entonces, desde estas páginas, nos ponemos firmes y lanzamos una campaña en apoyo ciego a Ben Affleck para que dirija (o bien protagonice) la película de La Liga de la Justicia.

Archivos no tan secretos: algunos casos de la CIA que terminaron siendo películas

La muerte del Che en Guerrilla (2008). Steven Soderbergh arremete sobre la figura del Che Guevara y señala con el dedo al Ejército Boliviano comandado por la CIA.

El asesinato de Kennedy en JFK (1991). En ella se examinan los eventos que llevaron al asesinato del presidente John F. Kennedy y su supuesto vínculo con la CIA.

La identidad revelada de Plame en Poder que Mata (Fair Game, 2010). La agente de la CIA Valerie Plame y la soltada de mano del gobierno de George W. Bush.

Seis Grados de Separación: De J-LO a Juego de Tronos

Jennifer López > Kevin Smith > Ben Affleck > Argo > Lord of Light > G.R.R. Martin

La teoría propuesta por Frigyes Karinthy, la de los Seis Grados de Separación, donde se intenta probar que cualquier persona en la Tierra puede estar conectada a otra a través de conocidos y tal, efectivamente funciona. De esta manera, el culo más grande de América Latina –no decimos cuál, ¿no?- sería contratado por Kevin Smith para protagonizar Padre Soltero (Jersey Girl, 2004). De ese rodaje, nacería el amor junto a Ben Affleck. Un romance mediático que llevó al ingenio popular a bautizarlos “Bennifer”, conjunción entre Ben y Jennifer, tema ampliamente explorado por el mencionado Smith en sus monólogos de An Evening with Kevin Smith (2002). Con el tiempo, Affleck iría dedicándose con solvencia a la dirección cinematográfica. Su último proyecto, Argo (2012), tiene inevitables referencias a la obra Lord of Light que, a su vez, cuenta con un epílogo de G.R.R. Martín, el mentor de la serie Juego de Tronos (Game of Thrones). ¡Ajám! ¿Vieron?

Reseña de Critters 2: El Plato Principal

MEDIO: 13º Festival Buenos Aires Rojo Sangre
FECHA: Octubre 2012
Reseña de Critters 2: El Plato Principal

Catálogo impreso

Critters 2: El plato principal

(Critters 2: The Main Course / Mick Garris, EUA-1988 / 93’)

Viernes 26, 20hs, Sala 6
Sábado 27, 14hs, Sala 6

Tras el éxito arrollador que significó Gremlins en 1986, no podía faltar su exploitaition primo hermano: Critters. En este caso, producto de la línea de sucedáneos y aventuras aparecidas a raíz de tal boom, la historia de Critters 2: El plato principal se posa pocos años después de la primer entrega. Al descubrimiento de nuevos monstruos se le suma el regreso de Brad Brown y sus cazarrecompensas, quienes brindarán batalla al ritmo de trepidante acción y mucho de comedia. Dirige Mick Garris que es, en rigor, uno de los grandes del cine de terror mundial y célebre, a su vez, por adaptar a Stephen King y crear la serie de TV Masters of Horror. (Hernán Panessi)

Reseña de The Human Race

MEDIO: 13º Festival Buenos Aires Rojo Sangre
FECHA: Octubre 2012
Reseña de The Human Race

Catálogo impreso

The Human Race
Paul Hough / EEUU – 2012 / 90´

Martes 30, 22hs, Sala 7
Miércoles 31, 16hs, Sala 7

Es sabido: el concepto de “lucha a muerte” es una constante en el mundo del cine. Y acá, en The Human Race, aquella entelequia se estira como un elástico –mortal, polémico, sangriento- trayéndonos una maratón (así, literal, pero tal vez no del modo en que se la imaginan) en donde setenta y nueve personas elegidas al azar se juegan la vida al ser obligados a competir entre sí. De esta manera, la película de Paul Hough, que ya la rompió en festivales con su corto The Angel, deviene en un grindhouse moderno, uno de bajo presupuesto pero muy ambicioso, donde la configuración del misterio se torna trepidante y el devenir de los personajes principales –los dos veteranos de la Guerra de Irak y los dos amigos con discapacidad auditiva- tiene momentos de alto riesgo, sujetos siempre a algunos vaivenes de moralidad y ética humana. Con giros a la ciencia ficción, The Human Race se presenta como el aporte de la independencia norteamericana a esa síntesis llamada, incluso por el tagline del film, como “Race or Die…” (corre o muere).

Hernán Panessi

Reseña de Little Monsters

MEDIO: 13º Festival Buenos Aires Rojo Sangre
FECHA: Octubre 2012
Reseña de Little Monsters

Little Monsters
David Schmoeller / EEUU – 2012 / 107´

Martes 30, 16hs, Sala 6
Miércoles 31, 22hs, Sala 6

Alguna vez, el mismísimo Alfred Hitchcock se arrepintió de hacer volar a aquel niño en la secuencia de la bomba en Sabotaje. En esa lógica de golpe bajo, John Carpenter asesinó a balazos a otra purreta en Asalto en el Precinto 13. Sin embargo, como es de suponerse, hay en esas muertes un factor shockeante, un mensaje de crudeza incomparable. Entonces, a la manera de El Petiso Orejudo y su historia mitificada en El Niño de Barro, David Schmoeller, recordadísimo por ser el responsable de gemas como Puppetmaster o Trampa para Turistas, se despacha con Little Monsters, una película repleta de oscuridades en donde dos niños de 10 años secuestran y matan a una nena de apenas 3. Condenados a vivir como delincuentes, a sus 18 primaveras vuelven a ser reinsertados en la sociedad con identidades falsas. Así, Schmoeller, después de una buena parva de cortometrajes entre los que se destacan Ha, Ha Horror y Thor at the Bus Stop, regresa con todo y se separa del terror clásico yendo por la senda del cine de asesinos juveniles. Una vuelta que hacía falta a través de un sub-género explotado más no tan glorificado.

Hernán Panessi

Anfitrión en la presentación de la novela "Letra Muerta", de Guillermo Bawden & Cezary Novek

MEDIO: Blog de Letra Muerta
FECHA: Octubre 2012
Anfitrión en la presentación de la novela "Letra Muerta", de Guillermo Bawden & Cezary Novek

Domingo 28, 19:30hs

Presentación de “Letra muerta”, de Guillermo Bawden & Cezary Novek, co-editado por Fan Ediciones y Llanto de Mudo Ediciones.

“Letra muerta” es una novela que nos presenta un apocalipsis zombie con una condición aterradora: no pasa en otro país, sino que transcurre en la provincia de Córdoba. Bawden y Novek son dos escritores cordobeses que iniciaron la aventura de muertos vivos en forma de blog, con entradas que reproducían los mensajes desesperados de dos grupos de sobrevivientes en localidades diferentes, que se comunican a través de una paloma mensajera con la esperanza de encontrar una mano salvadora, una explicación al desastre, o un disparo piadoso. A partir de esa premisa, desarrollaron la novela que presentamos. Se contará con la presencia de los autores. Invitado: Hernán Sáez. Anfitrión: Hernán Panessi.

Para ver más información sobre el Festival Buenos Aires Rojo Sangre, hacé click acá.

Mención en el elenco de Trash 2: Las Tetas de Ana L.

MEDIO: Sarna Cine
FECHA: Octubre 2012
Mención en el elenco de Trash 2: Las Tetas de Ana L.

Mención en entrevista a Alejandro Soifer

MEDIO: See Ya Brotha!
FECHA: Octubre 2012
Mención en entrevista a Alejandro Soifer

Entre otros aparecen: Durgan Nallar (ex jefe de redacción de XtremePC), Moki y Rolo (redactores estrella de la Xtreme…), Juan Del Compare (uno de los primeros roleros en la argentina), Federico Velasco (actualmente a cargo de Comiqueando), Andrés Accorsi (no necesita presentación), Sergio Marchi (editor de la vieja PC Juegos), el fundador de la Asociación Tolkien Argentina (ATA), Lucas Ferrero (comiquero extremo), Diego Doe (vendedor de action figures and stuff), José Luis Parada Sabio (coleccionista), la gente de la Rebel Legion y la 501 (las dos asociaciones oficiales de fans de Star Wars, por los Jedis y por los Sith), Hernán Panessi (una de las cabezas atrás de Videoflims, la distribuidora de cine bizarro), Axel Kuschevatzky y varios, varios más entre los que se incluyen nerds que viven de ser nerds, zombies de la Zombie Walk, etc.

Entrevista por VideoFlims, junto al actor Pablo Picotto

MEDIO: Hagamos un trato (Radio y Punto)
FECHA: Octubre 2012
Entrevista por VideoFlims, junto al actor Pablo Picotto